lunes, 17 de noviembre de 2008

Ser actor o actriz, me pregunto si se deja de ser persona?

Nace de la bipolaridad, del continuo dilema, de los llamados métodos... pero todo esta en eso que no sabemos como se llama; algunos la llaman alma, otros conciencia, yo la llamo entraña.

Ser actor o actriz, me pregunto si ¿se deja de ser persona?

Trabajas para vivir emociones, para manipular emociones, tus emociones, las de los demás. Pero, quien vive esas emociones? el actor? el personaje? la persona? o todas juntas?...

Según mi experiencia "escasa" cuando vivo con demasiada fuerza las emociones de un personaje, estas emociones traspasan la brecha, pasa esa delgada línea que delimita la ficción de la realidad... y si son tan fuertes esas emociones, afectan a la persona, haciendo que las vivan un "todo" y que se fundan realidad y ficción (no me gusta llamarlo mentira, porque no lo es).

¿Será por eso que la genialidad y la locura van de la mano?
Creo que la genialidad puede superar a la persona y llevarla a la locura.
Hay que marcar con tinta indeleble, la diferencia...
Que el actor que es a su vez el personaje y la persona, pueda estar 2 horas llorando y gritando, sintiendo como se desgarra su vida por un conflicto que le supera en escena y el cual tiene que "bordar"... y después de todo... terminar la función y salir como si nada, con gran alegría, dejando atrás y en el olvido al personaje sufrido y dejándole en claro que volverá a resurgir de la nada, sólo cuando sea necesario, sólo por la función.


Es complicado... es complicado una vez que lo tienes, marcar el límite.



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